sábado, 22 de marzo de 2008

Un cuento para dormir, o sino contaré ovejas!

¿Cómo le hago? ¿Cómo hacen Uds.? Cuando tienen que tomar una decisión súper importante, o por lo menos parece serlo.


Hace tiempo me enamoré, fue el momento más feliz de mi vida. Todo fue perfecto, la persecución, las salidas, el primer besito, la primera vergüenza, el primer beso, la primera cogida de manos, la primera vez, la primera vez que te llaman princesita (y no suena cursi),la primera declaración de amor, el primer sí, el primer mes, el primer año, la primera borrachera (con él), el primer viaje juntos, las primeras compras para nuestra casa, nuestro primer carro, el primer beso bajo la nieve, nuestro primer paseo en tierras lejanas, nuestra primera perdida, nuestro primer televisor, la primera cena sorpresa, nuestra primera pelea… y de pronto, todo se acabó. ¡Todo! Ese sin dudas fue el momento más triste de mi vida, después de la muerte de mi primo, siendo una tristeza totalmente distinta.


Después de varios meses, de posponer la pena, ella sin dudas llega. No te pide permiso, no te toca la puerta, simplemente llega. Pero es muy astuta, viene cuando te encuentra sola, cuando sabe que no hay moros en la costa. Ahí cuando bajas la guardia, en el momento menos pensado. Y pues vino.



“¡Me encontraste! pensé yo, con mi corazón aún latiendo entre manos. Esta vez me encontró, sin trabajo, sin novio, sin amigos, en un departamento frío en pleno verano. Sin rayitos de sol, porque viene por las noches, sigilosamente para no notar su presencia ya anunciada.”



Resulta que sí, me encontró, me encontró pero yo cerré mis ojos, los apreté fuerte y pensé en voz alta, casi gritando, para que escuchara, ¡VETE! Desde entonces merodea mi ventana, y mandó a su amigo insomnio para que yo me de cuenta de su presencia, ¡Oh sí! Todas las noches.


Entonces con esa presión hago de nuevo mi pregunta, ¿Cómo saber si la decisión que toman es la correcta?


Hay muchas decisiones que tomar, y todas las he ido posponiendo, ¿será que eso es lo que hago mejor? ¿Posponer las cosas? O es sólo que esta vez, con este tiempo (que no es), pero siento que es de sobra, me he dedicado a pensar y tal vez traer con el pensamiento a cosas que no quiero que merodeen en mi ventana?


Como me gustaría que estés aquí esta noche... ¡Sueño, vuelve pronto!

1 comentario:

JoseLo dijo...

Pas pas pas, esta chevere el post.
Me gusto más que el del calzón. Trata de dormir, porque si sigues sin hacerlo, vas a pensar mas huevadas.